Mentiras, el musical, esa entrañable carta de amor a la balada ochentera mexicana, ha hecho cantar, reír y llorar a miles desde su debut en 2009, pero detrás del telón, entre vestuarios fluorescentes y pelucas altas, la armonía no siempre reinó.
En el episodio más reciente del canal de YouTube "Sin mentiras", el creador y director José Manuel López Velarde reveló un capítulo poco conocido y bastante tenso de la producción: una pelea casi física entre Natalia Sosa y Mariana Treviño, dos de las actrices más icónicas del elenco original.
El problema fue de egos
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Según el director, todo comenzó con una escena en la que el personaje de Lupita, interpretado por Mariana Treviño, debía bajar la falda a su compañera Daniela (Natalia Sosa), en un acto cómico e irreverente acorde al guión. Sin embargo, Natalia interpretó ese gesto como una intención de robar foco.
A Mariana se le subía la falda y el personaje respondía bajándosela o sacándose el calzón. Pero Natalia decía que eso era un recurso para llamar la atención
Lo que parecía un desacuerdo actoral escaló rápidamente, al grado que un día, casi llegan a los golpes, según admitió el director, visiblemente incómodo al recordar el momento, que culminó con técnicos separando a ambas actrices y es que aunque intentaron resolver la situación reforzando los vestuarios con silicón y varillas, la tensión no se disipó fácilmente.
Curiosamente, ambas actrices han tenido exitosas carreras después de Mentiras. Mariana Treviño ha conquistado plataformas como Netflix con su papel en Club de Cuervos y películas como A Man Called Otto junto a Tom Hanks. Natalia Sosa, por su parte, es una figura respetada del teatro musical y ha brillado con luz propia en proyectos como Hoy no me puedo levantar.