Katy Perry atraviesa su quinta gira mundial, The Lifetimes Tour, y todo marchaba con la energía de siempre hasta que un momento inesperado en Perth, Australia, encendió la conversación en redes.
Mientras interpretaba “I’m Still Breathing” y saludaba a las primeras filas, un fan estiró el brazo para entregarle un labubu, una de las figuras coleccionables que han ganado popularidad en todo el mundo. La cantante reaccionó con un gesto contundente pues golpeó el obsequio con su micrófono y este salió volando fuera de su vista.
El instante quedó grabado y subido a TikTok, donde se viralizó de inmediato. En cuestión de horas, la plataforma se llenó de comentarios divididos, algunos defendieron a la artista asegurando que solo seguía con el show, mientras otros criticaron la aparente brusquedad de su respuesta.
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La polémica creció porque, segundos después del incidente, Perry continuó cantando, repartió galletas entre los asistentes y, con tono divertido, remató la escena con un “no labubus”.
Para los seguidores más atentos, la frase no fue una sorpresa completa. En publicaciones anteriores, la propia Katy había bromeado tras bambalinas con ese mismo “no labubus”, un chiste interno que terminó saliendo a la luz sobre el escenario australiano.
Por eso, muchos fans interpretan el golpe como parte de esa dinámica humorística y no como un rechazo. Al cierre del concierto, la cantante no profundizó en el tema, sin embargo la pregunta persiste, ¿fue un momento de show sin mayor intención o una reacción exagerada? Sea cual sea la respuesta, el clip dejó claro que, en la era de los videos virales, cualquier gesto sobre el escenario puede convertirse en tendencia global en cuestión de minutos.