Un simple gesto visual bastó para encender las redes cuando en una historia de Instagram, Maite Perroni compartió una portada de revista en la que posaba junto a Christian Chávez y Christopher Uckermann, pero decidió tapar el rostro de Anahí, despertando una oleada de críticas entre seguidores de RBD.
En la dinámica, la actriz decidió mostrar solo las publicaciones donde figuraba los rostros de sus compañeros varones y el suyo propio, dejando cubierto el de su excompañera.
Este detalle fue suficiente para que los seguidores de la agrupación lo interpretaran como un desplante directo hacia la que en momentos llamó incluso 'su hermana', generando una ola de críticas en cuestión de minutos.
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En la misma publicación, usuarios calificaron el acto de “inmaduro”, “celoso” y “una señal de que los rencores no han sanado” según se pudo leer en distintos comentarios.
El momento adquiere peso en el contexto del reciente distanciamiento confirmado por Perroni. En febrero de 2025, la artista declaró que ambas pensaban diferente por lo que como adultos tomaron distintas decisiones, cuando fue cuestionada sobre su relación con Anahí y Dulce María.
Y aunque la gira Soy Rebelde Tour fue un éxito masivo, las heridas detrás del legado persisten, pues este desliz digital revive interrogantes sobre la posibilidad de un reencuentro formal: Perroni ha sido clara al decir que “por lo pronto no hay ningún plan”
La situación ha puesto nuevamente a Maite en el centro del huracán mediático, alimentando la percepción de que la fractura dentro de RBD es más profunda de lo que se admite públicamente.