Después de las celebraciones, cenas largas o uno que otro antojito de más, es común que el estómago resienta los excesos con pesadez, inflamación o incomodidad. La buena noticia es que existen bebidas naturales que pueden ayudar a mejorar la digestión y hacer que el cuerpo se sienta más ligero sin recurrir a soluciones complicadas.
Estas opciones son ideales para consumir al día siguiente o incluso por la noche, cuando la sensación de llenura aparece:
1. Té de jengibre:
Ayuda a estimular la digestión y a reducir gases e hinchazón gracias a sus propiedades antiinflamatorias, lo que lo convierte en un gran aliado tras una comida pesada.
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2. Agua tibia con limón:
Favorece la producción de bilis y facilita el proceso digestivo, además de ayudar a disminuir la retención de líquidos que suele aparecer después de los excesos.
3. Té de menta o hinojo:
Estas hierbas contribuyen a relajar el sistema digestivo, reduciendo la distensión abdominal y la sensación de incomodidad.
4. Té de manzanilla:
Su efecto calmante no solo ayuda a relajar el cuerpo, también puede disminuir la inflamación estomacal después de comidas copiosas.
5. Agua de pepino con menta:
Refrescante y ligera, es ideal para mantenerse hidratado mientras combate la inflamación de forma natural a lo largo del día.
6. Jugo de papaya o smoothie digestivo:
La papaya contiene enzimas que facilitan la digestión de los alimentos, ayudando a evitar la sensación de pesadez prolongada.
Incorporar estas bebidas a la rutina después de una comida abundante puede marcar la diferencia y ayudar al organismo a recuperar su equilibrio de manera natural, ligera y sin complicaciones.