LEY SECA

Este país castiga con multa a quienes manejan tras beber cerveza ‘sin alcohol’

Aunque diga 'sin alcohol', una cerveza con 0.5% podría activar el alcoholímetro en Brasil y causarte una multa y suspensión de licencia

La Ley Seca en Brasil es estricta incluso con las bebidas que dicen no tener alcohol Créditos: Freepik
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¿Te imaginas que te multen por tomar cerveza sin alcohol? En Brasil, esto puede ocurrir, ya que incluso las bebidas con leyenda “sem álcool” pueden contener un mínimo porcentaje de alcohol. Su estricta Ley Seca aplica tolerancia cero al conducir bajo cualquier nivel de alcohol detectable.

De acuerdo con el artículo 165 del Código de Tránsito Brasileño, si un conductor da positivo en la prueba de alcoholímetro —sin importar cuán baja sea la cantidad— puede recibir una multa de 2,934.70 reales (alrededor de 10,500 pesos mexicanos), perder puntos en su licencia y quedar inhabilitado para conducir durante un año. En casos repetidos o con circunstancias más graves, la sanción puede ser mayor.

En Brasil la estricta ley seca, podría multar a quienes toman bebidas sin alcohol. Crédito: Freepik

¿Por qué sancionan el consumo de cervezas sin alcohol?

La legislación brasileña permite que las cervezas etiquetadas como “sin alcohol” contengan hasta un 0.5% de alcohol por volumen, según la normativa del Ministerio de Agricultura. Es decir, no todas las cervezas que aparentan ser seguras para conductores están completamente libres de etanol.

Un informe del Instituto Nacional de Metrología (Inmetro) indica que, aunque en muchos casos esa pequeña cantidad no basta para activar el alcoholímetro, hay factores como el volumen ingerido, el metabolismo de la persona o el tiempo transcurrido desde el consumo que pueden alterar el resultado.

Por eso, las autoridades brasileñas recomiendan optar solo por bebidas etiquetadas como “0,0%” y evitar conducir inmediatamente después de consumir cualquier producto con contenido alcohólico, aunque sea mínimo.

En Brasil, manejar después de tomar una cerveza sin alcohol no es un juego: puede salirte tan caro como si hubieras bebido una con grado alcohólico tradicional.