En un mundo donde las rutinas de belleza parecen cada vez más complicadas, la respuesta a una piel radiante podría estar justo en tu cocina.
Además de limpiar profundamente los poros y aportar un brillo natural, esta mascarilla combina lo mejor de la naturaleza para una piel más saludable
La combinación de yogurt natural, miel orgánica y jugo de limón fresco se ha convertido en un clásico del cuidado facial gracias a sus múltiples propiedades dermatológicas.
Te podría interesar
El yogurt suaviza gracias al ácido láctico, además actúa como un exfoliante suave que elimina las células muertas y estimula la renovación celular.
La miel actúa como un potente hidratante y antibacteriano; conocida por sus propiedades humectantes ayuda a calmar la piel irritada y prevenir imperfecciones.
Mientras que el limón aporta vitamina C y propiedades astringentes que pueden aclarar manchas leves y equilibrar tono de la piel, además de controlar el exceso de grasa.
Diversos dermatólogos coinciden en que, si bien esta mezcla puede ser efectiva, debe usarse con precaución en pieles sensibles por el contenido ácido del limón.
Lo recomendable es aplicarla una vez por semana, preferentemente por la noche, y enjuagar bien antes de aplicar protector solar al día siguiente.