La cantante británica Jessie J, conocida mundialmente por éxitos como Bang Bang, atraviesa uno de los momentos más difíciles de su vida. Diagnosticada con cáncer de mama en 2025 y sometida a cirugía hace apenas siete semanas, ahora deberá volver al quirófano por complicaciones en su salud, según confirmaron fuentes cercanas y la propia artista en redes sociales.
El inicio de semana trajo un susto inesperado: Jessie J fue ingresada a un hospital en Londres después de presentar dolor en el pecho y dificultad para respirar. Los médicos temieron un embolismo pulmonar, una condición potencialmente mortal, pero las pruebas descartaron la presencia de coágulos. Sin embargo, detectaron líquido en uno de sus pulmones y una infección cuyo origen continúa bajo investigación.
Fiel a su espíritu independiente, la intérprete decidió dejar el hospital el mismo día para continuar su recuperación en casa. A través de un mensaje a sus seguidores, confirmó que necesitará someterse a una nueva cirugía antes de que termine el año, aunque no dio detalles específicos sobre el procedimiento.
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“Se verá diferente a lo que había planeado, pero así es la vida… o entramos en pánico, o nos adaptamos. Estoy fluyendo con lo que viene y dando lo mejor que puedo”, compartió Jessie J, mostrando resiliencia pese a las dificultades.
La artista, de 37 años, ha sido transparente desde que hizo público su diagnóstico en junio, relatando momentos de miedo, ataques de pánico y los retos físicos que implicó su primera intervención. Más allá de su faceta musical, Jessie J es madre de Sky, su hijo de dos años con el basquetbolista danés-israelí Chanan Colman. La pareja, que sufrió la pérdida de un embarazo en 2021, celebró en 2023 la llegada de su “bebé arcoíris”.