La tercera temporada de La Casa de los Famosos México marcó un antes y un después en el formato, tras anunciarse cifras inéditas de votación durante la final. La conductora Galilea Montijo confirmó que en esta edición se superaron los 43 millones 155 mil 107 votos, cifra jamás alcanzada en las dos temporadas anteriores del reality, demostrando la conexión y el compromiso del público mexicano con el programa.
En la gran final, Aldo De Nigris fue coronado campeón al alcanzar 19 millones 139 mil 698 votos, imponiéndose con amplitud sobre sus competidores. El segundo lugar, Dalílah Polanco, sumó más de 10 millones 619 mil 904 votos, mientras que, Abelito quedó con 6 millones 247 mil 210 sufragios. Estas cifras reflejan el peso del público en el destino del reality y la capacidad de movilización que los finalistas lograron durante toda la temporada.
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El éxito no solo radica en los totales, sino en el crecimiento porcentual, los más de 43 millones de votos superaron con creces los récords de 40 millones logrado en la primera temporada y los 39.4 millones de la segunda edición. Con ello, esta tercera edición se convierte en la más votada hasta ahora.
La producción destacó que este nivel de participación refuerza el valor del formato interactivo, cada espectador tiene un papel decisivo en la narrativa del concurso, además, al abrir más canales de votación y alianzas con plataformas digitales, la audiencia pudo involucrarse más activamente.
También resalta la magnitud del respaldo regional, desde Monterrey hasta la Ciudad de México y comunidades locales, los seguidores celebraron su participación con reuniones en casas, bares y puntos de visualización colectiva. La respuesta masiva en redes sociales fue otra muestra del alcance del fenómeno televisivo.
Este récord en votaciones no solo legitima al ganador, sino que eleva la apuesta para las próximas temporadas, la audiencia exige más interacción, mayor transparencia y formatos que mantengan vivo su interés. La Casa de los Famosos México ya no solo es un reality, sino una plataforma donde el espectador manda con su voto.