El esperado debut actoral de Kim Kardashian en All’s Fair, la nueva serie de Ryan Murphy, no resultó como muchos imaginaban. Aunque su participación generó una fuerte expectativa, la producción fue recibida con una ola de críticas negativas que sorprendieron incluso a sus seguidores más fieles.
La serie ambientada en Los Ángeles cuenta la historia de un grupo de abogadas de divorcios que deciden fundar su propio despacho después de renunciar a una firma dominada por hombres. Kardashian interpreta a Allura Grant, una abogada poderosa y ambiciosa, pero su desempeño no logró convencer a los expertos.
En sitios como Rotten Tomatoes, el proyecto debutó con 0 % de aprobación y aunque con el paso de los días esa cifra aumentó un poco, la crítica se mantuvo implacable.
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Medios como The Sun y IBTimes la calificaron como “el peor drama televisivo jamás hecho” y señalaron la falta de profundidad del guion y el tono forzado de las interpretaciones.
“Su actuación se siente rígida y sin autenticidad” escribió uno de los críticos de GamesRadar, mientras que otros mencionaron que la serie se apoya más en la fama de su protagonista que en una historia sólida.
Hasta el momento, Kim Kardashian no ha hecho declaraciones sobre las reseñas negativas y en sus redes solo ha compartido contenido promocional de la serie y de su personaje.
A pesar del tropiezo, All’s Fair cuenta con un elenco de renombre que incluye a Naomi Watts, Glenn Close y Sarah Paulson. Sin embargo, ni siquiera sus actuaciones lograron salvar la historia de lo que muchos ya consideran un fracaso televisivo.
Por ahora, Kim Kardashian no ha revelado si continuará explorando su faceta como actriz, pero su debut deja una lección clara que no todo lo que toca una celebridad dorada se convierte en oro.