Durante el fin de semana, los grandes estudios encontraron en las franquicias su fórmula ganadora. Superman, la esperada producción dirigida por James Gunn y respaldada por Peter Safran, debutó con 217 millones de dólares en su apertura global, mientras Lilo & Stitch acaricia la marca de los mil millones, consolidándose como el fenómeno animado del año.
Tan solo en Estados Unidos y Canadá, Superman obtuvo 122 millones de dólares, convirtiéndose en el mejor estreno de DC desde Wonder Woman en 2017, superando así la recaudación de seis de las diez últimas películas de DC.
La historia sigue a un joven Clark Kent en sus primeros años como periodista en Metrópolis, mientras lidia con su doble identidad y su deseo de pertenecer a un mundo que aún lo percibe como forastero, logró en México, 8,8 millones de dólares, un crecimiento del 72% respecto a El Hombre de Acero.
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En paralelo, Disney avanza con paso firme. Su versión live-action de Lilo & Stitch, una historia entrañable que marcó a toda una generación, ya suma 994,3 millones de dólares y podría convertirse en el primer estreno de 2025 en alcanzar la codiciada cifra de los mil millones.
La adaptación considerada el mejor live-action de Disney, combina animación CGI con escenarios reales filmados en Hawái, manteniendo el corazón de la historia: la relación entre una niña huérfana y un experimento genético convertido en su mejor amigo, que incluso ya anunció una segunda entrega.
Por su parte, Jurassic World: Rebirth continuó su sólida trayectoria en la taquilla internacional, acumulando un total de $232.1 millones a nivel mundial, que la mantienen entre las más taquilleras del período. En cuanto a F1: The Movie, la cinta protagonizada por Brad Pitt y dirigida por Joseph Kosinski acumuló $393.4 millones, consolidándose como un éxito para Apple Studios y Warner Bros en el verano.