Después de más de una década viviendo en Estados Unidos, Irma Guadalupe y su hija Daniela regresaron a México con la ilusión de reencontrarse con su hogar en Tampico, sin embargo, lo que encontraron fue indignante: su casa estaba invadida por personas que no solo se negaban a salir, sino que además respondieron con burlas y desdén, como quedó registrado en un video viral en TikTok.
“Qué impotencia encontrar mi casa invadida por estas personas que no tienen vergüenza ni dignidad”, escribió Daniela. En la grabación, que acumuló miles de vistas, se ve cómo su madre enfrenta con firmeza a las ocupantes, mientras una de ellas, con tono sarcástico, lanza la pregunta: “¿Tiene usted esposo?”, ignorando por completo los documentos legales de propiedad.
Según explicó la propia Daniela, la casa fue rentada años atrás, pero las arrendatarias dejaron de pagar y jamás desalojaron, a pesar de los intentos legales desde el extranjero, fue imposible recuperarla… hasta que madre e hija decidieron volver.
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La historia se convirtió en un fenómeno digital, la comunidad en redes bautizó a la principal invasora como “Lady Ramona”, una referencia irónica al personaje de Don Ramón en El Chavo del 8, famoso por no pagar la renta. En este caso, el apodo sirvió para evidenciar un problema sistemático en México: la ocupación ilegal de propiedades ante la lentitud de los procesos judiciales.
El momento clave llegó cuando el desalojo fue transmitido en vivo. Más de 7 mil personas siguieron el operativo que culminó entre aplausos y gritos de “¡Sí se pudo!” al ver salir a las invasoras con ayuda de un camión de mudanza. “Hicimos justicia en Tampico”, escribió Daniela, quien compartió el video donde su madre se sienta de nuevo en el patio de la casa familiar.
La historia expuso no solo una injusticia, sino una conversación pendiente: ¿qué respaldo tienen los migrantes que, tras años de trabajo en el extranjero, regresan a un país donde su patrimonio fue vulnerado?
En México, la figura de usucapión puede ser aprovechada para apropiarse legalmente de un inmueble ocupado por años, lo que deja en desventaja a familias ausentes, como ocurrió con Irma, muchas personas compartieron testimonios similares en redes: casas tomadas, rentas impagas y autoridades que, por omisión, validan el despojo.